13 jun 2010

Un alma para el espacio litúrgico (I)

Durante las próximas semanas vamos a dedicar los domingos a la arquitectura religiosa y, en consonancia con la "línea editorial" de este blog traeremos cada semana un fragmento de un artículo del arquitecto italiano Ciro Lomonte sobre liturgia católica y arquitectura.


IGLESIAS FEAS

Las iglesias modernas no convencen. Al visitarlas, se percibe la dificultad de los contemporáneos para expresar lo trascendente en las obras de arte sacro. Los fieles están condenados a frecuentar iglesias parecidas a menudo a gimnasios, garajes, supermercados, escuelas o directamente piscinas. Tal vez la intención de quienes las diseñaron era reproducir las situaciones de la vida cotidiana en los lugares destinados al encuentro con la Trinidad. Y sin embargo en estos ambientes enajenantes no se logra establecer relación alguna con Dios ni con los hombres. Se advierte a veces la soledad como en ningún otro espacio. Y uno piensa que la iglesia ya no es el lugar donde se ora, sino donde tiene lugar la asamblea, precisamente como ocurre en las aulas de culto protestantes.

Se dice que las iglesias modernas son feas. Hoy en día una afirmación de este tipo corre riesgo de carecer de sentido, aun cuando ciertos estilistas suelen poner de moda lo feo en las prendas de vestir. ¿Qué es de hecho lo bello? ¿Como puede atribuir un valor universal al objeto de la percepción estética quien profesa el relativismo más dogmático?

Iglesia de S. Lucas en Graz (Austria). De izquierda a derecha y de arriba abajo: Altar Mayor, Tabernáculo, Lámpara del Santísimo y vista general.

La arquitectura moderna del siglo XX también ha producido obras de arte en este ámbito. El problema es que son un monumento del arquitecto a sí mismo, como el santuario de Ronchamp, de Le Corbusier, o las iglesias de Alvar Aalto. Desde este punto de vista no son arquitecturas logradas, ya que podrían emplearse para otros fines, operación que resultaría imposible en el caso de la catedral de Chartres o de S. Carlino alle Quattro Fontane.

Alvar Aalto, Iglesia de Santa María Asunta. Riola di Vergato, Bolonia, Italia, 1978.

Es comprensible la insatisfacción que dio origen hace más de veinticinco años a movimientos como el de la arquitectura tradicional, una corriente artística que propugna un retorno a las formas del pasado; pero el remedio es peor que el mal, por cuanto es más bien irrazonable proponer nuevamente en cemento armado estilos nacidos en otras épocas, en otras culturas, con otros materiales y distintas soluciones tecnológicas.

La arquitectura tradicional, cuyo exponente más destacado es Léon Krier(1), tiene gran difusión en los países anglosajones, donde cuenta con numerosos seguidores entre los arquitectos de iglesias. Estos últimos hacen un pésimo servicio a toda la Iglesia Católica, además de sus clientes, pertenecientes a grupos con nostalgia del Concilio de Trento. Ellos olvidan que la modernidad secularizada es hija – por más que sea una degeneración – de la religión católica, la única que siempre ha valorizado plenamente la razón. Ciertamente, el tradicionalismo es la fe muerta de los vivos y la Tradición auténtica es la fe viva de los muertos. El renovado diálogo entre fe y arte pasa necesariamente por la curación de los focos infecciosos que han condicionado negativamente el desarrollo de la civilización occidental.

Ejemplo reciente de arquitectura religiosa tradicional. Thomas Gordon Smith. Seminario de Nuestra Señora de Guadalupe. Denton, Nebraska, Estados Unidos, 2000.


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(1) Ver Léon Krier, Architettura. Scelta o fatalità, Laterza, Bari 1995. El proyectista luxemburgués, más que en la difusión del estilo clasicista que le dio fama en los años 80, actualmente está interesado en la promoción de una planificación urbanista – New Urbanism – centrada en los elementos que no pueden desaparecer en la vida social.

15 comentarios:

Serk1492 dijo...

¡Dios mío! ¿Pero qué son esas "iglesias"? :O
Ahí no entro yo ni con el Papa.
Si ya me asustaba con las que hay en mi ciudad (hay una de protestantes que parece un restaurante...), imagínate con esas...

"...el tradicionalismo es la fe muerta de los vivos y la Tradición auténtica es la fe viva de los muertos..."
Buena frase ;)

Saludos! ;D

Anónimo dijo...

El Movimiento Moderno, en un afán mal entendido por la arquitectura industrial y la tecnología, acabó construyendo Iglesias que parecían fábricas. Un caso muy conocido es el de la Capilla del Instituto Tecnológico de Illinois, que parece una sala de calderas o un simple almacén, en contraposición a la propia sala de calderas que con su chimenea parece más una capilla con campanario que la propia capilla.

No podemos pretender recuperar una tradición simplemente por la nostalgia o la estética; eso es quedarse en la superficie, en lo folclórico y para nade hace ningún bien. Por eso hay que vivirla para que se haga auténtica: y en esa recuperación los detalles son importantes, pero hay que saber trascenderlos para captar su esencia y voluntad originaria; sólo así podremos recuperar la tradición entendiendo lo que recuperamos.

Un saludo

Serk1492 dijo...

A ver si durante el verano puedo colgar en mi blog unas fotos de las famosas iglesias de San Pedro, de mi ciudad. Por la estética es de las "normales", de las de antes, pero la superfície no me gusta nada: sin sombra, sin tierra, sin árboles... nada más que bancos y cemento...

Anónimo dijo...

He visto algunas fotos, la verdad es que es una lástima que haya desaparecido la vegetación que tenía antes. Más allá del pintoresquismo, los jardines de una Iglesia representan el Paraíso Terrenal, y cada planta, cada flor, tiene asociado un símbolo divino o una virtud.

A primera vista, parece que ha habido un problema de querer trasladas las denominadas "plazas duras" que tanto éxito tuvieron en la Barcelona Olímpica a otras situaciones que para nada tienen que ver con la degradada Ciudad Condal de los ochenta.

Sería interesante conocer el nombre del arquitecto que hizo la restauración o si ésta fue realizada directamente por técnicos de la administración.

Padre Efrén dijo...

Absolutamente de acuerdo conn esta explícita y coherente entrada, hermano Iskander.
Muchas bendiciones.

Serk1492 dijo...

Padre Efrén:
el autor de esta entrada es nuestro compañero Pfunes. Quizás te hayas confundido jeje

Cordiales saludos! :)

Anónimo dijo...

Padre Efrén, en realidad yo únicamente me he limitado a reproducir un artículo escrito por el arquitecto palermintano Ciro Lomonte, especializado en arquitectura sacra.

Un saludo.

iskander dijo...

Padre Efrén, un placer encontrarle por aquí también y una satisfacción personal. Pero como bien dicen Serk Y Pfunes la entrada no es mía. ¡Ya me gustaría poder hacerlas simplemente parecidas!.
Un abrazo en Nuestro Señor Jesuscristo

Serk1492 dijo...

Seguramente se haya confundido por el diseño, ya que es el mismo que el blog Iskander jeje :)

Amigo. dijo...

Hola. Es un espanto, demuestran que no han entendido nada, transparencian mal gusto. Sencillamente como en la música, el vestido, etc. Creo que hay que construir en nuestro tiempo, conforme a la liturgia y la actividad,fíjate que han desaparecido muchos elementos como los retablos, altares y capillas laterales,etc, la iglesia, el templo, es el espacio en el que se realiza el encuentro de Dios y el hombre-comunidad-pueblo, es también el sitio en el que se conmemora el Sacrificio, se celebran, se festejan y se imparten los sacramentos, un lugar para escuchar, para reunirse, para venir a él que nos espera en el sagrario y permitir que él nos visite en el corazón, el encuentro presonal Dios-hombre se hace en tu corazón.

¿cómo está ese corazón?, el pecado lo tiene hecho una horterada farisea, un snobismo mentiroso, un sucio perezoso, un estridente lujurioso, avaro, irsacible,etc, o es una armonía de paz, de Gracia, de lucha por permanecer fiel, de sencillez en el reconocimiento de una condición pecadora que se confiesa en el sacramento con reconocimiento sincero de la propia miseria que quiere ser mejor, un templo lleno de las flores de las pequeñas victorias contra el hombre viejo... éste es el Templo más hermoso, tu corazón, de inmensa belleza que permanece escondida, en lo Secreto, allí donde se realiza el ENCUENTRO y este magnífico blog irá mostrando todos los detalles y rincones de 1000 razones para embellecer nuestros templos y arrojar las cosas feas por la ventana,tiempo para construir.

Amigo dijo...

Hola. Alvar Aalto, Javier Carvajal, Fisac, Félix Candela, mejor fijarnos en los buenos. Todos tenemos a veces algún que otro retablo horrendo, o espacio hortera en nuestro corazón que creo tenemos que remodelar, o deribar y reconstruir o sencillamente reformar. En el corazón, nuestro Templo, está el espacio del Encuentro con nuestro Señor, nuestro Salvador y Amigo.

Anónimo dijo...

Estimado Amigo, Ciro Lomonte es también arquitecto, un hombre de profundas convicciones religiosas y un devoto católico. Ha publicado varios artículos en revistas religiosas de reconocido prestigio tanto en Europa como en América y es uno de los firmantes del "Llamamiento a Su Santidad el Papa Benedicto XVI para volver a un Arte sacro auténticamente católico". Así que no creo que bajo ningún concepto evidencien el mal gusto que usted les atribuye. En esta primera parte del extenso artículo se muestra una realidad: las iglesias modernas son feas en términos estéticos absolutos (pues podrían ser teatros, oficinas, o almacenes) como en relativos al compararlos con iglesias más antiguas. Como bien indica, la mayoría de las Iglesias contemporáneas (e incluyo la de los arquitectos que usted cita, a pesar incluso de la religiosidad de Miguel Fisac y otros) son monumentos al inmenso ego del arquitecto y a unas ansias de modernización mal entendidas.

A lo largo de las siguientes semanas el sr. Lomonte va a ir desgranando las causas y efectos de esta arquitectura y las pautas a seguir para, sin recurrir a una estéril vuelta estética al pasado, crear un arte sacro que siente sus bases en la tradición pero sin renunciar a la contemporaneidad. Según usted, si la "moda" ha hecho suprimir de las iglesias muchos elementos que entorpecen la funcionalidad de la nueva liturgia, podemos admitir que por "moda" se conviertan nuestras liturgias en espectáculos circenses y poco menos que evangélicos o pentecostalistas (ambos en su sentido herético); y continuando el razonamiento, deberíamos admitir otras "modas" como la ausencia de recato y respeto porque son los tiempos que corren y hay que obrar según los tiempos.

No se trata de crear iglesias que parezcan salas de fiestas, ni tampoco recrear por puro capricho estético estilos de otros tiempos, ni siquiera desdeñar la apariencia exterior en busca de una introspección en la fe que únicamente lleva al relativismo individualista y a posturas cercanas a los protestantes (salvación a través de la fe). Este texto y sus continuaciones hasta completar el extenso artículo, pretenden mostrar la realidad de la arquitectura religiosa actual y aclarar algunos malentendidos sobre la arquitectura aplicada a la liturgia Concilio Vaticano II. Entendiendo éstas nos será más fácil entender por qué el Movimiento Moderno también fracasó en la arquitectura religiosa.

Un saludo

Amigo dijo...

Ante todo bajo la Obediencia, Como todo, necesita tiempo para ir encajando la Liturgia a la Arquitectura, bajo las indicaciones de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos. Dejar a cada arquitecto expresar y crear el espacio siguiendo las directrices y disposiciones, dejar que la obra sea también una Alabanza a Dios. Hay que obrar según el Evangelio. Nuestra voluntad conforme a la de Dios, en humildad y sencillez, frecuentando los sacramentos.

La Modernidad ha muerto.

En esto estamos hoy, los hay que pasean un cadáver por toda la meseta,los hay que han emprendido la marcha, comienzan a Caminar, para lograr el Espacio Sacro es imprescindible la Encarnación, lo que tiene el arquitecto en el corazón hacerlo material, que se toque, vivimos de la Eucaristía, Amor casi cosificado, Misterio de la Fe, Centralidad de cada latido, luego queda la Trascendencia, pero ésta fluye del mayor o menor acierto en el logro del Espacio, en él se debe expresar el Kerygma, naturalmente empleando el hormigón armado, el acero, el keblar, las piedras, etc. Nuestro tiempo. Los hay que quieren volver atrás, sólo falta que los fieles lleguen a la iglesia en carruaje.

Sin querer extenderme, sólo quiero recordar que la Liturgia es Direccional, es un Caminar en el Desierto, un movimiento hacia adelante, mientras que la oración es una centralidad, quietud, comunicación con el que Permanece, con el Eterno, es precisa la meditación del Segundo Eterno para comprender la dimensión y potencia del hombre en estado de Gracia. En el Sacrificio, éste Poder conferido al hombre por el Orden es del todo asombroso, admirable, que aólo puede continuar en Alabanza y Gloria a Dios, en el conjuro Dios mismo se hace presente en la Santa Hostia. Comprender esto, lo que se pueda, es labor del arquitecto y también de todos los trabajadores de la obra, cada uno aplicando su técnica, habilidad,etc contribuyen en la armonía, luego vienen los artistas, los escultores, los pintores, los carpinteros, la ergonomía de un sencillo banco es hoy un aspecto a cuidar tanto como la luz.

Jamás visiten una iglesia gótica o románica con las luces artificiales encendidas,por ejemplo, procuren hacerlo en estado 'primigenio' y luego mediten sobre arquitectura.No hablemos de los encalados, etc.

Se han hecho unas iglesias modernas Magníficas.

Nadie ha pretendido hacer salas de fiesta, si bien algunos resultados han sido horribles, desastrosos, pero preconciliar fue Notre Dame du Haut y ya ves qué joya... la más reciente de la corona la de Tombazis en Fátima...

Las malas obras, pues como en todo, como las malas películas, no simpre se puede parir una obra maestra. Sí, parir, con maternidad. Basta tener presente la Maternidad en la Obra.

Retorno para los más críticos, Obediencia, en especial al Espíritu Santo y al CVII, Tú eres Pedro, Credo in unam, sanctam, catholicam et apostolicam Ecclesiam...

Amigo dijo...

Otra joya, en versión libre, es la de Saarinen en el Mit.

Non-denominational chapel at the Massachusetts Institute of Technolog.

Ladrillo, panteón, meditación, trascendencia... Blanco, Luz, Dios.

Amigo dijo...

Otra joya en versión libre, es la de Saarinen

Non-denominational chapel at the Massachusetts Institute of Technology.

Ladrillo, Panteón, Meditación, Trascendencia, Luz, Dios.