Todos los hombres pueden ser débiles o fuertes,
justos o pecadores.
La única diferencia entre un hombre miserable y un hombre de honor,
es que cuando el miserable realiza una buena acción,
se vanagloria de ello toda la vida,
mientras que un hombre justo no reparaba en sus buenas acciones,
pero recordaba durante años un pecado cometido
justos o pecadores.
La única diferencia entre un hombre miserable y un hombre de honor,
es que cuando el miserable realiza una buena acción,
se vanagloria de ello toda la vida,
mientras que un hombre justo no reparaba en sus buenas acciones,
pero recordaba durante años un pecado cometido
2 comentarios:
Quizá eso explique por que los socialistas se vanaglorian tanto de lo que consideran "logros".
¡Feliz Navidad!.
jajjaja que buen humor tienes Soldado, me gusta
;)
¡Felices Fiestas navideñas!
¡Que el Niño Dios nazca en nuestros corazones!
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